Reseña bibliográfica / Book  review

Velázquez, M. A. y Balslev, H. (2021).

La política pública de turismo en México. La construcción de nuestra identidad..

Benemérita Universidad Autónoma de Puebla

 

Las políticas públicas entrañan un complejo conjunto de elementos que interactúan entre sí a través del tiempo. Con ello, organismos gubernamentales, legislaturas en todos los niveles, instituciones públicas y privadas, organizaciones internacionales, investigadores, gestores y la sociedad civil, se involucran y participan en el marco de dichas políticas públicas con el objetivo de generar iniciativas.

 

Ahora, cuando se trata de políticas en materia de turismo todos los actores inmersos diseñan objetivos, desde sus valores e intereses, para dar respuesta a los efectos que el turismo globalizado tiene sobre el territorio, la sociedad y la cultura, ya que esta actividad tiene el poder de incidir en la construcción de las identidades, como lo explica el libro que aquí se reseña.

 

Para comprender el proceso de las políticas públicas de turismo en México, se requiere tener un conocimiento de los objetivos y las percepciones de todos los actores, porque inciden en cómo se debe presentar un destino turístico, la forma en que se debe enfocar la mirada del turista y quiénes son los beneficiarios, los contendientes, los dependientes, los desviados y los complementarios en estos procesos. Justamente, esos elementos son analizados por los autores del libro La política pública de turismo en México. La construcción de nuestra identidad; Mario Alberto Velázquez García y Helene Balslev Clausen se centran en un estudio sobre el turismo desde una mirada sociológica, bajo la cual logran mostrar con claridad el impacto que este tiene en la identidad. Para ello, como dice Paul A. Sabatier, fue fundamental conocer los debates de las políticas públicas de todos los actores involucrados y al mismo tiempo entender el rol que juegan (2010, p. 6).

 

El libro tiene como objetivo central“analizar la construcción social del turismo como una de las principales operaciones económicas, de las políticas públicas y la construcción de la identidad en Latinoamérica y particularmente en México” (Velázquez y Balslev, 2021, p. 10); sin embargo, a diferencia de muchas otras obras que abordan el turismo desde las ciencias políticas, los estudios culturales y la economía, incluso desde la sociología de manera marginal, este trabajo analiza directamente el fenómeno a partir de la construcción social de las poblaciones objeto en el marco de las políticas públicas y las características de la percepción de la realidad. En este punto surge la pregunta: ¿el turismo es un constructor de nuestra identidad? La respuesta está en la reseña que aquí se presenta.

 

La obra como un todo configura un análisis y reflexión del turismo, considerando su impacto en el territorio mexicano y cómo las políticas públicas influenciadas por personajes extranjeros, básicamente estadounidenses, han modelado la identidad del mexicano. Ello resulta impactante, ya que se pensaría que es el Estado el rector de los asuntos de la nación y de la soberanía cultural; no obstante, lo que indican los autores es que las políticas en materia de turismo vienen del exterior. Para ello, Velázquez y Balslev construyen un argumento sólido a partir de un modelo de análisis, cuyo objetivo es demostrar que el turismo constituye una fuente de transformación, no solo económica sino social, cultural y también espacial, donde las políticas públicas juegan un papel fundamental.

 

Para comenzar, plantean un panorama del turismo en América Latina y el Caribe, así como de sus políticas públicas afines a través de la historia. Desde ahí, el lector puede darse cuenta de cómo el Estado mexicano se ha visto sometido a los intereses trasnacionales, sobre todo de Estados Unidos, lo cual particularizan en tres casos concretos: Álamos en Sonora, Taxco en Guerrero y Tepoztlán en Morelos. Posteriormente, realizan un exhaustivo análisis del Programa de Pueblos Mágicos, desde el cual surge otra pregunta: ¿en estos casos dónde está la “autenticidad”? como lo plantea MacCannell (2003, p. 140). Cabe destacar que el modelo teórico que ofrecen permite al lector observar al turismo como la actividad económica que genera diversos esquemas de relación entre todos los sectores: de desigualdad, de exclusión, modifica los territorios con desplazamiento poblacional y causa severos daños al medio ambiente.

 

De igual manera, se descubren en esta obra los diversos cambios en los patrones culturales locales o nacionales, evidenciando lo complejo que resulta la construcción de los marcos normativos y legislativos. Por tanto, se habla de las relaciones de poder que existen entre la actividad turística y el Estado: los intereses, las dimensiones, los lugares, los procesos sociales y su interacción, que de alguna manera son los factores que definen una realidad. En ese sentido, para observar dicha realidad los autores hacen uso de los planteamientos de Peter L. Berger y Thomas Luckman, referentes a los comportamientos y los problemas dentro de las políticas públicas, además de definir qué son, a partir de cinco elementos: la intencionalidad, la intersubjetividad, la temporalidad, la realidad (ordenada y objetiva) y las zonas no problemáticas y problemáticas.

 

Estos elementos permiten comprender una serie de dimensiones que ayudan al lector a profundizar en los diferentes casos, bajo un marco general en la construcción social de la población objeto. Este planteamiento es, en pocas palabras, una especie de hoja de ruta que guía las metas, los medios y a los actores hacedores de políticas públicas. Estos actores son: los beneficiarios, a quienes se busca apoyar por medio de recursos gubernamentales, con medidas fiscales o administrativas; los contendientes, que tienen actividades productivas no compatibles con el turismo; los dependientes, que son considerados incapaces de desarrollar su actividad sin el apoyo gubernamental; los desviados que “dan mala imagen”, al ser considerados como amenazas para el desarrollo del turismo y, finalmente, los complementarios, con actividades paralelas a las establecidas de manera formal.

 

En resumen, lo que proponen Mario y Helene es el análisis del qué, el cómo y el para quién de una política pública, incluyendo las interacciones sociales y de poder que, como ellos mismos lo dicen, se deben abordar con este instrumento. Se distingue que la construcción del turismo en Latinoamérica, la política social que reconstruyó la identidad de lo mexicano, la influencia de los turistas extranjeros en este proceso y el desarrollo en las comunidades (o más bien los dilemas del desarrollo), más el Programa de Pueblos Mágicos pasan por este modelo, lo que hace de su postura una teoría metodológica que posibilita la comprensión del trabajo en su totalidad.

 

Durante todo el siglo XX las políticas públicas de turismo tuvieron un papel fundamental en el desarrollo económico y cultural en Latinoamérica, en particular en México, tanto que hasta la identidad nacional se ha visto influenciada por los turistas, principalmente del vecino país del norte, que han llegado y se han quedado, reinventando la historia, las tradiciones y las maneras de ver la nación mexicana.

 

En este sentido, los autores sostienen que la construcción social del turismo no era parte del proyecto del gobierno o de los empresarios nacionales; sin embargo, en algunos casos existen propósitos ideológicos que permiten formar discursos dirigidos a las políticas turísticas, como es el caso de Cuba y su revolución o de México y su posrevolución.

 

Es justo decir que en esta obra se establece magistralmente un relato sobre las políticas públicas en materia de turismo en México y de cómo se crea la necesidad de establecer territorios para el turismo extranjero, como Tijuana, Ciudad Juárez, Acapulco o Cancún, que parten de la necesidad de encontrar nuevos destinos para los turistas. Se recorre asimismo la evolución histórica de las políticas públicas de todo el siglo XX, en las que se puede apreciar cómo se desarrolla todo un mecanismo de generación de leyes, reglamentos y agentes que van moldeando la gestión turística en el país, hasta la ocurrencia del Programa de Pueblos Mágicos.

 

Una vez más, los autores hacen gala de su modelo de análisis de las políticas públicas de turismo y ponen a prueba de manera exitosa sus postulados, lo que permite establecer en la lectura una guía para el sujeto que incursiona en el tema. Un aspecto que queda muy claro es que estás políticas no están generando beneficios a muchos de los sectores que se encuentran en la periferia del turismo.

 

A manera de cierre, es posible afirmar que el libro contribuye a la generación del conocimiento sobre los estudios del turismo y es materia para todos aquellos que están en busca de nuevos contenidos que vayan más allá de la administración o la gestión; es decir, este trabajo abre un camino para emprender nuevos itinerarios en el territorio de la investigación.

 

Referencias

MacCannell, D. (2003). El turista: una nueva teoría de la clase ociosa. Melusina.

 

Sabatier, P. (2007). Teorías del proceso de las políticas públicas. Westview Press.

 

Velázquez, M. A. y Balslev, H. (2021). La política pública de turismo en México. La construcción de nuestra identidad. Benemérita Universidad Autónoma de Puebla.